El colegio Nuestra Señora del Duero descubrió las bases del deporte del balón oval de la mano de El Salvador, protagonista de la novena jornada de 'El deporte VA al cole'
El rugby vallisoletano tiene 34 seguidores más; uno por cada uno de los alumnos del colegio Nuestra Señora del Duero, escenario de la novena jornada de 'El Deporte VA al cole', una actividad nacida en la Fundación Municipal de Deportes y la Asociación de la Prensa Deportiva de Valladolid que pretende promocionar el deporte en los centros educativos vallisoletanos.
En el colegio de Puente Duero aterrizaron el jugador del equipo de División de Honor Sam Katz, las jugadoras del equipo femenino Trina Moir y Elisa Altés y el técnico Víctor Acebes para enseñar a los jóvenes aprendices de rugbiers el 'ABC' de su deporte.
Con juegos como herramienta de aprendizaje, los más pequeños (de 3 a 5 años) formaron una melé en la que descubrieron cómo pasar el balón, recibir, esquivar o placar, con una simulación de nombre 'rugby touch' que consiste en quitar unas cintas atadas a la cintura de sus compañeros.
En la balanza de la diversión, los más mayores (hasta los 12 años) tampoco se quedaron atrás. Después de practicar el pase y la recepción experimentaron la sensación de anotar su primer ensayo y disfrutaron del trabajo en equipo en un simulacro de partido.
Pero el rugby dura más que el tiempo del partido y esa lección también se impartió en Nuestra Señora del Duero. El señorío y la deportividad del deporte del oval quedó reflejada en los pequeños alumnos del colegio, que hicieron el pasillo a sus compañeros al finalizar la actividad, antes de recibirle ellos.
El rugby llegó a Puente Duero para quedarse. Para que el oval no fuera más que un recuerdo de un día especial, el club se convirtió en un Rey Mago fuera de Oriente. Regaló un bolígrafo y unas cintas para jugar a cada uno de los niños y entregó al colegio unos balones ovales y una unidad didáctica de rugby para que el balón pueda seguir presente a orillas del río Duero. La Asociación de la Prensa Deportiva de Valladolid también quiso agradecer al club su involucración en este proyecto haciéndoles entrega de unos polos y unos contravientos de la APDV.